Windows Server 2012 agota su soporte extendido: ¿y ahora qué?
Windows Server 2012 ha alcanzado el límite de su vida operativa. En sus dos versiones, tanto la estándar como la R2. El 10 de octubre de este 2023 ha marcado el final de su soporte extendido. Si te preguntas cómo puedes afrontar esta eventualidad, en este post vamos a presentarte varias alternativas para hacerlo.
El mes que viene, Windows Server 2012 cumplirá diez años. Y, aunque inicialmente Microsoft tenía previsto ofrecer soporte para este sistema hasta 2018, finalmente decidió extenderlo hasta 2023. Ahora, incluso ese soporte extendido ya ha finalizado y muchas empresas que han estado utilizando este SO tienen ante sí un abanico de opciones para seguir adelante.
Por un lado, existe la posibilidad de contratar Actualizaciones de Seguridad Extendidas durante tres años. Se trata de una opción pensada más para actuar como puente hasta la solución definitiva que como una solución en sí misma. Tras el primer año, su coste es superior al de una licencia estándar y, una vez se haya alcanzado su periodo máximo de vigencia, el 13 de octubre de 2026, ya no habrá más extensiones.
Otra posibilidad es migrar a alguna nueva versión de Windows Server, como la 2016, la 2019 o la 2022. En este caso, optar por la opción más reciente, la 2022, nos permitiría contar con soporte en principio hasta el 14 de octubre de 2031. Con lo que, en unos años, volveríamos a enfrentarnos otra vez a un dilema como el que estamos afrontando en este momento. ¿Qué otra posibilidad nos queda? Migrar nuestro servidor a la nube, en ese caso, puede ser la mejor solución. Y no sólo a nivel de operatividad, sino también para asegurarnos de esquivar los problemas que puede dar el hecho de contar con un sistema operativo obsoleto en un servidor.
Problemas que pueden derivarse de no contar con un SO actualizado en un servidor
El hecho de no contar con un sistema operativo convenientemente actualizado en un servidor puede generar muchos problemas. En líneas generales, podemos agrupar los diferentes niveles que podrían verse condicionados por posibles afectaciones a través de la siguiente lista:
- Cumplimiento. En muchos casos, asegurarse del adecuado cumplimiento de nuestros sistemas depende también directamente de que dichos sistemas cuenten a su vez con soporte por parte del distribuidor. En el caso de sistemas operativos, como Windows Server, el hecho de que finalice el soporte implica que automáticamente ese cumplimiento esté comprometido en el caso de que apliques cargas de trabajo no soportadas o uses aplicaciones que están fuera de las regulaciones.
- Pérdida de soportabilidad o retrasos en casos de eventos inesperados. Desde el 10 de octubre de 2023, las empresas que no opten por Actualizaciones de Seguridad Extendidas, o cuando estas terminen efectivamente en 2026, perderán soportabilidad o podrían experimentar retrasos en la solución de posibles eventos o amenazas a la seguridad. E, incluso, abonar un pago aparte al recibir el soporte necesario.
- Mayor riesgo de exposición ante posibles ataque. Los sistemas operativos no soportados son el blanco predilecto de los ciberdelincuentes. Al no tener soporte, pueden estar seguros de que posibles brechas no detectadas no serán solucionadas o bien de que dicha solución no llegará lo bastante a tiempo. Así, el riesgo de exposición a posibles ataques se multiplica y eso puede repercutir, a su vez, en pérdidas de ingresos o pérdidas de reputación ante los clientes de la empresa.
- Imposibilidad de aprovechar nuevas características y funcionalidades. Las versiones de Windows debidamente soportadas reciben periódicamente nuevas característica y nuevas funcionalidades. Una ventaja que, en el caso de depender de un software que ya no cuenta con el correspondiente soporte, dejaremos también de aprovechar en nuestro negocio.
Cómo puedes migrar a la nube para afrontar el final del soporte de Windows Server 2012
La mejor forma de afrontar el final del soporte de Windows Server 2012 o Windows Server 2012 R2 es, sin duda, la migración a la nube. La tecnología Cloud, como Microsoft Azure, ofrece múltiples ventajas, tanto a nivel de ahorro en costes de adquisición de hardware y su necesario mantenimiento como a nivel de eficiencia. Además, podremos asegurarnos de contar en todo momento con lo último tanto en hardware como en software y, de paso, ahorrarnos quebraderos de cabeza.
Desde AWERTY, a través de nuestros Servicios de Migración para Infraestructura Cloud, podemos ayudarte a llevar a cabo la migración de forma eficiente. Nuestro objetivo es ayudarte a mejorar la infraestructura informática de tu negocio en todos los ámbitos: seguridad, backup, eficiencia y cumplimiento normativo. Y, por otro lado, podrás obtener también la siguiente serie de beneficios:
- Relevo generacional y una renovación de servicios de mantenimiento en hardware y software.
- Acercamiento de las necesidades de inversión tecnológica con las empresariales.
- Paso de un modelo de inversión en capital (CAPEX) a uno de gasto operativo (OPEX).
Para llevar a cabo el proceso de migración al Cloud, aprovechamos las ventajas que ofrece Microsoft Azure Migrate. Por medio de esta herramienta, podemos identificar y reunir fácilmente detalles sobre la infraestructura, las bases de datos, aplicaciones e interfaces de escritorio virtual para el cliente. De esta manera, resulta posible mapear con precisión las dependencias y estimar el el coste de múltiples escenarios. Una acción que, a su vez, nos permite facilitarte la propuesta que mejor puede adaptarse a las características y necesidades de tu negocio.
Con esta herramienta, además, podemos ayudarte a establecer un plan para llevar a cabo la migración de acuerdo con tus términos. Para ello, en primer lugar, evaluamos la preparación de los recursos locales con los que puedas contar en tu empresa. Y, acto seguido, los ajustamos a un tamaño que permita obtener una relación óptima entre su coste y su rendimiento en Azure. Siempre, por supuesto, con las máximas garantías de seguridad y cumplimiento normativo que ofrecen las tecnologías Microsoft.
Te ayudamos a elegir el mejor modelo de migración a la nube para tu negocio
La migración a la nube puede afrontarse a través de cuatro modelos diferentes:
Rehost. En este caso, la migración de los equipos, ya sean físicos o virtuales, hacia el Cloud se lleva a cabo respetando la capa de sistema operativo y las aplicaciones que tenga instaladas el cliente. Es la solución más rápida y la de menor coste para llevar a cabo la migración a la nube.
Refactor. Los datos del cliente se migran a una Plataforma como Servicio (PaaS). Aunque este modelo de migración tiene un impacto económico mayor a corto plazo, también ofrece una reducción de problemas tanto de mantenimiento como de seguridad a largo plazo.
Rearchitect. Este modelo de migración a la nube suele adoptarse para solucionar problemas de diseño de la infraestructura o para adaptarla al crecimiento de la organización. En este caso, armoniza los datos y aplicaciones dentro de un modelo 100% Cloud desde el punto de vista de Infraestructura como Servicio (IaaS), Plataforma como Servicio (PaaS) o Software como Servicio (SaaS).
Rebuild. En algunos casos, lo más conveniente es transformar el modelo existente de Servidor-Aplicación-Dato a uno de Plataforma como Servicio (PaaS). Así, logramos reducir la gestión y el mantenimiento de capas no productivas. Habitualmente, esta suele ser la opción más comúnmente elegida para servidores de bases de datos o servidores web.
Desde AWERTY, cómo no, te ayudaremos a elegir el modelo que mejor se adapte a las necesidades de tu negocio. Si tienes alguna duda o pregunta que plantearnos, ponte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de darte todas las respuestas que necesites. Sin compromiso. Nuestro objetivo es convertirnos en tu partner tecnológico de referencia. Y, así, ayudarte para que puedas aprovechar todo lo que la transformación digital y la tecnología Cloud pueden hacer para mejorar tu negocio.